Se acaba de publicar el primer título del flamencólogo y escritor Juan Diego Martín Cabeza "Jondo". Integrado en la serie Colección de Documentos, de la Editorial Barataria. En breve publicaremos reseña y crítica.
A Federico Vázquez Esteban, socio fundador de la Peña Amigos del Cante, debo la suerte inmensa que ha supuesto conocer a la afición zamorana y su decidida labor en favor del flamenco. Cuando he venido a Zamora siempre he sentido que el Cante Jondo se manifiesta en un ámbito que no le es ajeno. El flamenco llega aquí con una desnudez sincera, alejado de tópicos y de malintencionados localismos; libre en su expresión y fiel a su capacidad emotiva, porque la Peña Flamenca “Amigos del Cante” selecciona y mima la programación de sus recitales y sobre todo de este gran Festival que marca el día grande para el flamenco en la ciudad. Y el público zamorano corresponde a esa entrega con respeto y afición sobradamente demostrados a lo largo de tantos años. Aquí se escucha y paladea el cante porque lo Jondo se percibe de una forma que tiene mucho que ver con esta tierra. Hace falta ciertamente una actitud especial para enfrentarse a la desbordante alegría de la bulería y, tan sólo un cante después, estar preparado siempre para el posible zarpazo amargo de una seguiriya. Así, como en nuestro día a día, la felicidad y la pena se van alternando en un camino donde el arte, la música, la poesía, se parece tanto a la vida que es muy difícil separarlos…En Zamora este año vuelve a reencontrarse el flamenco con una parte sustancial de sus orígenes; con el romancero cantado de padres a hijos, en el que los amores y batallas de afamados caballeros dieron lugar con el paso del tiempo a la clara y fresca poesía popular:
Con la publicación, en 1955, del libro Flamencología de Anselmo González Climent, se iniciaba en la historia del flamenco una nueva etapa histórica, que se ha denominado precisamente de la Flamencología. Etapa que se ha caracterizado por la defensa y exaltación del flamenco como hecho cultural, con creación de cátedras e instituciones, y con el inicio de todo tipo de publicaciones. Como manifestación artística el flamenco afloró hacia una tendencia neoclásica con recuperación histórica. Un camino que llevaría al reconocimiento universal con que hoy cuenta el mismo.
Parece mentira que resulte tan fácil poder simplificar la historia delFlamenco hasta llegar a nuestros días...1.- Ya en el siglo XVIII la Cultura Popular Española exprime sus zumosmás frescos del Sur al Norte de la Península. Las familias del Sur yacelebran sus fiestas con músicas y coplas que les son propias.2.- En el Siglo XIX se separan e identifican los cantes y bailes mássignificativos de cada región y comienzan a comercializarse y a serestudiados por los folkloristas...El Flamenco se hace Arte y Negocio.3.- A partir de ahí resulta fácil hablar de “La edad de Oro”, “La ÓperaFlamenca”...etc. Pero desde “los 50” hasta hoy queda clarísimo que debedescribirse como “La era de los Festivales”...Primero Córdoba, comoaldabonazo y luego como continuidad Utrera, Morón, Mairena, Lebrija,etc... Resulta admirable y lógica la incorporación de Zamora, entre losprimeros y más importantes, ahora hacen 37 años (y lo que se tardó engestarse)...y me sumo personalmente a esta Edición con los compañeroscríticos y periodistas de toda España.
La treintena y algo de años que lleva el Festival Flamenco de Zamora, es demostración palpable de una realidad indiscutible. Mientras muchos festivales iniciados en su misma época han desaparecido y pocos quedan tan “añejos”, Zamora persiste en su permanente realización y con un empeño digno de admiración. La entelequia que pudiera parecer desde afuera en cuanto a la afición flamenca zamorana, queda anulada ante la muestra continuada de actividades flamencas que la ciudad y sus pueblos realizan, propiciadas fundamentalmente por la excelente labor llevada a cabo por la Peña Flamenca “Amigos del Cante” de Zamora, a través de sus miembros y bajo la dirección del excelente y eficaz trío compuesto por Eduardo Abril, Félix Rodríguez y Federico Vázquez Esteban. “Un amigo del Flamenco”.