
Paco de Lucía, emplea en “Almoraima” varias innovaciones sin precedentes hasta la fecha: Cada uno de los ocho temas del disco tienen más de una, y a veces hasta cinco pistas de guitarra; bajo eléctrico; percusión; una pista de guitarra tapá y, de vez en cuando, laúd y cante. Todos estos elementos han dificultado tremendamente la tarea de la transcripción. A pesar de ello, el maestro Enrique Vargas ofrece en cada tema diferentes soluciones siempre con la máxima fidelidad al original.
Todas las piezas son perfectamente ejecutables tanto para un solo como para un dueto (con excepción de la rumba y sevillanas que sólo son aptas para dueto). Cada tema viene además precedido por anotaciones explicativas bilingües castellano/inglés. Las partituras están presentadas en solfeo y en cifrado. Tanto las digitaciones de ambas manos como los matices dinámicos y técnicos se presentan de la forma más pormenorizada posible.